¿Qué es el autoconsumo?
El autoconsumo es la capacidad de un hogar o empresa para producir su propia energía y, por lo tanto, no depender de fuentes externas o de industrias importantes. La energía más común para el autoconsumo es la energía solar, por ser la energía más económicamente accesible y de fácil instalación. Cabe destacar que al producir y utilizar la propia energía no solo se logra la independencia de las grandes compañías energéticas, sino que se ahorra a mediano y largo plazo en la factura de la luz.
Consejos sobre el autoconsumo fotovoltaico
Estos son algunos de los pasos y recomendaciones que debes seguir para poner en marcha tu propia instalación fotovoltaica y empezar a disfrutar de los beneficios del autoconsumo:
- Disponer de espacio suficiente y ubicado estratégicamente para que pueda recibir la mayor cantidad de sol posible, por ejemplo, un tejado, un jardín, una terraza, etc.
- Tener en cuenta que la mejor orientación para instalar los paneles fotovoltaicos es al sur, ya que son más productivos cuando los rayos de sol inciden de forma perpendicular sobre ellos.
- Contactar con una empresa especializada para que se encargue de realizar los trámites técnicos y administrativos necesarios, así como la instalación.
- Aprovechar los diferentes beneficios que ofrecen las administraciones: desde deducciones en la declaración de la renta (EE.UU.), reducciones en el IBI (España), reducciones de IRPF (Francia), etc.
Es posible vender o compensar el excedente gracias a la nueva regulación sobre autoconsumo por el Real Decreto 244/2019. Estos mecanismos te permitirán reducir tu factura de la luz gracias a la energía que se produce y no se consume durante la instalación de los paneles solares.
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Los consumidores solo pueden estar asociados con un patrón de consumo a la vez. Para aprovechar cualquiera de estos términos, los clientes asociados deben tener un contrato de suministro de energía. Quienes no realicen previamente este contrato, deberán sustituirlo por un contrato de acceso directamente con la empresa distribuidora o con la empresa comercializadora.
Autoconsumo fotovolatico
El autoconsumo fotovoltaico es un sistema con el que generamos energía eléctrica para consumo propio, a través de la energía solar. Existen dos tipos de instalaciones de autoconsumo que hacen posible estos dos elementos indispensables: paneles fotovoltaicos, que son producen energía y los inversores solares, que son los que transforman la corriente continua obtenida de las celdas fotovoltaicas en corriente alterna para poder ya poder usarse en las viviendas o empresas

La capacidad de generar energía limpia en el propio hogar, hace que muchas familias preocupadas por el cambio climático tomen esta opción como una solución a los problemas que las energías no renovables causan a nuestro planeta.
Autoconsumo con excedentes o sin excedentes, ¿Cuál es más recomendable?
Dentro de las categorías mencionadas podemos diferenciar dos tipos de autoconsumo fotovoltaico en función de los excedentes:
Autoconsumo con excedentes
El autoconsumo con excedentes se le considera a aquellas instalaciones que además de suministrar energía eléctrica para autoconsumo, pueden inyectar energía excedente en las redes de transporte y distribución. A este grupo pertenecerán las instalaciones de producción próximas y asociadas a las de consumo (tanto en red interior como las que utilicen la red de distribución o transporte).
Las instalaciones de autoconsumo con excedentes a su vez se pueden dividir en dos tipos: autoconsumo con excedentes acogida a compensación y autoconsumo con excedentes no acogida a compensación.
En caso de que el sistema de generación fotovoltaica produzca energía en exceso, éstos excedentes pueden verterse a la red eléctrica tradicional:
Requisitos para acogerse a la compensación:
- La principal fuente de energía debe ser una energía renovable.
- La potencia total de la instalación no debe ser superior a 100kW.
- El consumidor debe estar suscrito en un único contrato de suministro para el consumo asociado y para consumos auxiliares con una empresa comercializadora.
- El consumidor y productor asociado deben estar suscritos a un contrato de compensación de excedentes de autoconsumo definido en el artículo 14 del RD 244/2019.
- La instalación de producción no debe estar sujeta al régimen retribuido adicional o específico.
Las instalaciones de autoconsumo colectivo sin excedentes acogidas a compensación no necesitan firmar un contrato de compensación. De este modo, basta con formalizar un contrato de reparto de energía firmado por los consumidores asociados.
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Autoconsumo sin excedentes
Se consideran instalaciones sin excedentes aquellas que están conectadas a la red de distribución y que disponen de un sistema que impida el volcamiento de energía eléctrica excedente a dicha red de distribución, es decir, este tipo de autoconsumo no puede verter energía excedente a la red eléctrica tradicional.
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Tanto en el autoconsumo sin excedentes como en el autoconsumo con excedentes, el consumidor y el propietario de la instalación generadora pueden ser personas físicas o jurídicas diferentes. Dentro de cada modalidad de autoconsumo: sin excedentes o autoconsumo con excedentes; podemos distinguir dos clasificaciones: autoconsumo individual o autoconsumo colectivo
Pero, ¿qué sucede con el excedente de energía producido en ambos tipos de autoconsumo?
- 👉 En el caso del autoconsumo conectado, la energía se puede verter a la red obteniendo una compensación por excedentes. Si la instalación es aislada, la energía se puede almacenar en baterías y el dueño podrá disponer de ella en cualquier momento, dependiendo de las necesidades que tenga en concreto, éste podrá optar por una opción u otra.
- 👉 Recuerde que, en tiempos de baja producción fotovoltaica, la energía almacenada puede no ser suficiente para alimentar la casa. Por eso recomendamos mantener el hogar conectado a la red. También, se puede optar por una instalación conectada sin compensación residual, pero ésta no aumenta la rentabilidad del sistema.
Tipos de autoconsumo fotovolatico según su lugar de instalación
Autoconsumo individual y autoconsumo colectivo
En España, el autoconsumo está sujeto a lo dispuesto en el Real Decreto 244/2019, de 5 de abril, por el que se definen las condiciones técnicas, administrativas y económicas para el consumo autónomo de energía eléctrica.
En dicho cuerpo legal el autoconsumo se puede clasificar en autoconsumo individual o colectivo. Los consumidores sólo pueden asociarse a una de las mencionadas modalidades. Para acogerse a cualquiera de ellas, necesitan contar con un contrato de suministro de electricidad. Este contrato puede ser sustituido por un contrato de acceso acordado directamente con la empresa distribuidora.
En ambas modalidades de autoconsumo, los consumidores tienen la posibilidad de instalar elementos de almacenamiento asociados a su instalación de producción, como pueden ser las baterías de litio.
Autonomia individual
Hace referencia a un único consumidor asociado a la instalación de producción. Por ejemplo: cuando se instala un sistema de generación fotovoltaica para una vivienda unifamiliar, negocio, oficina o industrias.
Autoconsumo colectivo
Tal como lo dice su nombre, el, autoconsumo colectivo hace referencia a un grupo de personas que se asocian para realizar una instalación fotovoltaica de forma conjunta.
Es aquel en el que varios consumidores están asociados a la instalación de producción cercana. Dicha instalación fotovoltaica sirve a varios consumidores. Este caso puede ser común por ejemplo, cuando se colocan placas solares en la azotea de un edificio, varias viviendas unifamiliares que quieren compartir una misma instalación de producción fotovoltaica, con el fin de que el sistema de abastecer energía de forma comunitaria.
Existen otros tipos de instalaciones de autoconsumo colectivo que entran en esta denominación:
Planta fotovoltaica en nave industrial:
Otra forma de beneficiarse del autoconsumo colectivo es, por ejemplo, instalar una planta fotovoltaica en una nave industrial y repartir la energía a viviendas o edificios cercanos. Sin embargo, para esta instalación existen algunas condiciones marcadas por la ley que se deben tener en cuenta:
- Aquellos usuarios que se conecten a esta distribución de energía deberán tener baja tensión en el transformador.
- La ubicación de la vivienda o edificio no deben estar a más de 500 metros en proyección ortogonal.
- Estas mismas, deben tener la misma referencia catastral.
Comunidades energéticas
Consiste básicamente en entidades legales formadas por asociaciones interesadas localizados cerca uno de otros, en la cual se encargan de generar energía y comercializarla entre todos los miembros. Estas asociaciones suelen ser comunidades sin ánimo de lucro que buscan que los miembros asociados, vecinos, empresas y algún otro grupo de personas, se beneficien de la reducción de costos energéticos.
Autoconsumo para industrias o empresas
El autoconsumo no se limita a abastecer sólo a residencias. También existen la opción para grandes empresas. El funcionamiento no varía y al igual que en el caso del autoconsumo residencial, las empresas se benefician de el notable ahorro en la factura de luz.
La principal diferencia entre las instalaciones fotovoltaicas para empresas y las instalaciones residenciales son:
- El tamaño
- El consumo energético
- Las horas en las cuales se consume la energía que, generalmente, en empresas son horarios laborales (dependiendo de la actividad a la que se dedique), a diferencia de una residencia donde el consumo de energía es en diferentes periodos de tiempo a lo largo del día.
Autoconsumo residencial conectado o aislado
- El autoconsumo conectado a la red, la instalación va a tener 2 conexiones: una al sistema eléctrico de la vivienda y otra a la red de distribución, propiedad de una compañía eléctrica.
- El autoconsumo aislado, por su parte, supone la desconexión total de la red de distribución. Esta segunda opción implica que, de no contar con baterías o almacenamiento de energía, la vivienda no tendrá energía eléctrica.
Es más, muchas veces las baterías no son suficientes y en estos casos se deberá contar con un generador eléctrico. Todo esto supone mayor inversión para el cliente y mayor riesgo para el cliente de quedarse sin electricidad, frente a quedarse conectado a la red. En esta modalidad, al no verte energía a red, y de acuerdo con el Real Decreto 244/2019, solo existirá la figura de consumidor.
Subvenciones y ayudas para el autoconsumo:
Una de las mayores ventajas que se podrían destacar del autoconsumo es que, en la actualidad, dispone de multitud de subvenciones, ayudas y desgravaciones para fomentar su desarrollo e implantación en España.
Puedes consultar con más detalle en nuestra sección sobre subvenciones para placas solares y conocer mejor en qué consisten, pero en resumen son:
- Bonificaciones del IBI
- Bonificaciones del ICIO
- Deducuiones del IRPF
- Ayudas autonómicas
- Ayudas estatales
Con estas ayudas, por ejemplo, para una instalación en una vivienda, se pasa de amortizar en 8-10 años a casi la mitad.
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